Amistades
In Amistad23 diciembre 2009
Frases para la historia... de mi curro
In Frases célebres (en el trabajo)21 diciembre 2009
Escribir con luz
In Fotografía13 diciembre 2009
El manifiesto por la defensa de los derechos en internet y la cumbre de Copenhague
In Animal humano, In Ecología, In Naturaleza, In Política, In Reflexiones, In Sociedad10 diciembre 2009
Nadie
In Poesía, In SentimientosY el tiempo se detuvo...
In Reflexiones09 diciembre 2009
Color Esperanza
In Música, In Yo y mis circunstancias16 noviembre 2009
Sé que hay en tus ojos con solo mirar
que estas cansado de andar y de andar
y caminar girando siempre en un lugar
Sé que las ventanas se pueden abrir
cambiar el aire depende de ti
te ayudara vale la pena una vez más
Saber que se puede querer que se pueda
quitarse los miedos sacarlos afuera
pintarse la cara color esperanza
tentar al futuro con el corazón
Es mejor perderse que nunca embarcar
mejor tentarse a dejar de intentar
aunque ya ves que no es tan fácil empezar
Sé que lo imposible se puede lograr
que la tristeza algún día se irá
y así será la vida cambia y cambiará
Sentirás que el alma vuela
por cantar una vez más
Vale más poder brillar
que solo buscar ver el sol
Y eso es lo que tengo...
In Amor, In Poesía, In Psicología, In Sentimientos, In Yo y mis circunstancias11 noviembre 2009
Poesía y Felicidad
In Poesía, In Yo y mis circunstanciasGracias Ferran por tu regalo, por lo que dices más allá de las palabras... gracias por VER.
Me gustaría compartir con todos tu regalo... aquí os lo dejo.
Amada poeta de la noche estrellada, gracias.
Gracias por formular la pregunta,
pregunta que surge de tu necesidad... de SER real.
Las preguntas traen respuestas, solo respuestas...
dejando de correr regresas a casa.
Salías corriendo, regresas andando.
Regresando a casa...
cuando la pregunta era dilema,
cuando el dilema era problema,
cuando el problema tan solo era... una situación.
Los problemas dejan de serlo cuando "mi" problema está resuelto,
resuelto por la solución.
La situación se ha resuelto,
ahora eres solvente;
no importa si sueñas consciente o vives despierta...
sal de la confusión, alegría de la noche.
ve más allá del poema
tú eres la poesía,
la poesía eres tú,
la felicidad eres tú.
lo mismo que una poesía solo tiene sentido
si sus palabras están desnudas de palabrería
y armónicamente vinculadas;
tú te comprendes con tu lengua materna,
con la lengua de los dioses.
Libre de prejuicios y condicionamientos.
Libre a pesar de todo,
libre gracias a la integridad,
nadando como una niña, desnuda...
en el mar de la verdad.
Ignorada o reconocida,
nada puede ocultarte,
nada te puede negar.
puedes ser o no feliz, mas...
¡Eres Felicidad!
Bajo la lluvia - Juana de Ibarborou
In Poesía, In Reflexiones04 noviembre 2009
¡Cómo resbala el agua por mi espalda!
¡Cómo moja mi falda,
y pone en mis mejillas su frescura de nieve!
Llueve, llueve, llueve,
y voy, senda adelante,
con el alma ligera y la cara radiante,
sin sentir, sin soñar,
llena de la voluptuosidad de no pensar.
Un pájaro se baña
en una charca turbia. Mi presencia le extraña,
se detiene... me mira... nos sentimos amigos...
¡Los dos amamos muchos cielos, campos y trigos!
Después es el asombro
de un labriego que pasa con su azada al hombro
y la lluvia me cubre de todas las fragancias
de los setos de octubre.
Y es, sobre mi cuerpo por el agua empapado
como un maravilloso y estupendo tocado
de gotas cristalinas, de flores deshojadas
que vuelcan a mi paso las plantas asombradas.
Y siento, en la vacuidad
del cerebro sin sueño, la voluptuosidad
del placer infinito, dulce y desconocido,
de un minuto de olvido.
Llueve, llueve, llueve,
y tengo en alma y carne, como un frescor de nieve.
Kali
In Cuentos, In El viaje de Innana, In Mitología, In Reflexiones, In SueñosDe pie, una frente a la otra... en medio el fuego, y sobre nuestras cabezas el cielo tachonado de estrellas como testigo. Es inevitable sentirse inmensamente pequeña... ella es Tierra, Aire, Agua y Fuego, el Todo. Se oye el rugir de las olas, ir y venir, y sabes que es su sangre, aspiras el aire y sientes la calidez de su aliento, miras el fuego y ardes bajo su mirada... te sostienes en la tierra y es su piel la que te sostiene.
"Nada puede nacer de nuevo sin ser antes destruido. Para renacer deberás reducirte a cenizas. Yo soy la madre dadora de vida, yo soy la madre destructora. Soy muerte y soy vida"
La brisa marina trajo a nuestros oídos la música de cientos de tambores, del batir de palmas, la música primigenia que era el latido de la tierra. Se acercaba y se alejaba, era estridente y rápida o suave y lenta como un susurro... comenzamos a girar y girar alrededor del fuego, dando saltos y gritos cuando la música nos llevaba, deslizándonos y cimbreándonos como serpientes, al ritmo de los susurros, con suavidad...
"La vida es sensualidad, báilala. Siéntela... recorre cada poro de tu piel... es excitación... es fuego"
El sudor bañaba nuestros cuerpos, y miles de gotitas se iluminaban por el reflejo de las llamas... éramos seres de luz danzando alrededor de la hoguera, girando y girando... nuestras sombras se recortaban en la arena, creciendo y empequeñeciéndose, girando en la rueda de la vida...
"La vida es muerte, es llanto, tormenta y cenizas... es el descanso en la tierra, es el frío...la muerte está contigo, vívela"
La música se vuelve frenética, la danza es cada vez más rápida... se acerca el climax... las llamas se alzan y su crepitar es más fuerte... nos envuelve la tormenta, arrecia el viento, lo tambores taladran los oídos... después, todo es oscuridad.
El mar es sólo un susurro, el fuego ya es sólo ascuas y cenizas, el viento ha parado y las estrellas han sido engullidas por un nuevo amanecer... tumbadas en la arena dejamos que las olas laman nuestras piernas, que refresquen el fuego, que disuelvan las cenizas...
"Sumérgete en las aguas. El océano es fuente y origen de toda vida. Es tu madre y es tu padre, te sanará las heridas... ahora devuélvele aquello con lo que cargas"
Y como un vómito sin principio ni fin, la rabia y el rencor comenzó a salir por mis manos, por mis ojos y por mi boca... una masa negra y viscosa, cuyos tentáculos habían aprisionado mi lengua, mi garganta, mi corazón y mi alma... una masa que iba cayendo al mar y desaparecía en él, como si nunca hubiera existido... a veces creí que me llevaba con ella, como si esa rabia contenida, cuya existencia desconocía, hubiera sido la razón de seguir adelante... pero el mar se la llevaba con él y yo quedé vacía... al final, sólo quedaron dos pequeñas y brillantes piedras negras. Kali lanzó una hacia el horizonte, al sol naciente. Yo lancé la otra.
"Esto es el principio del fin... aún habrás de ser cenizas, para renacer de nuevo".
Once minutos
In Amor, In El viaje de Innana, In Erotismo, In Literatura, In Psicología, In Reflexiones, In Sentimientos18 octubre 2009
Apagar la luz. Cerrar las cortinas.
Pedirle que se quite la ropa. Quitarse también la suya.
La oscuridad física nunca es total.
Sacar dos pañuelos, cuidadosamente doblados... acercarse a él y pedirle que le vende los ojos. Él duda por un momento y comenta algo sobre algunos de los infiernos por los que ya pasó.Ella le dice que no se trata de eso, que simplemente necesita tener oscuridad total, que ahora es su turno de enseñarle algo, como ayer él le había enseñado sobre el dolor. Él se entrega, se pone la venda. Ella hace lo mismo. Están en la verdadera oscuridad, uno precisa de la mano del otro para llegar hasta la cama.
No, no debemos acostarnos. Vamos a sentarnos como siempre hemos hecho, frente a frente, sólo que un poco más cerca, de modo que mis rodillas toquen tus rodillas.
Siempre quiso hacer esto, pero nunca tenía lo que necesitaba: tiempo.
Está harta, quiere que las semanas que faltan pasen rápidamente y por eso se entrega a ese hombre, porque allí está la luz de su propio amor escondido. El pecado original no fue la manzana que Eva comió, fue creer que Adán tenía que compartir exactamente lo que ella había probado. Eva tenía miedo de seguir su camino sin la ayuda de alguien, y entonces quiso compartir lo que sentía.
Ciertas cosas no se comparten. Tampoco se puede tener miedo de los océanos en los que nos sumergimos por nuestra libre voluntad, el miedo obstaculiza el juego de todo el mundo... Amémonos los unos a los otros, pero no intentemos poseernos los unos a los otros.
"Amo a este hombre que está frente a mí porque no lo poseo, y él no me posee. Somos libres en nuestra entrega (...)".
(...) El hombre también es una mujer, quiere encontrar a alguien, descubrir un sentido para su vida.
Me gustaría darle la felicidad de enseñarme algo nuevo, como lo que ayer me enseñó sobre el sufrimiento (..). Vi que es feliz cuando me hace aprender algo, entonces que me haga aprender, que me guíe. Me gustaría saber cómo se llega hasta el cuerpo, antes de llegar al alma, a la penetración, al orgasmo.
Extiende el brazo y le pide a él que haga lo mismo. Susurra unas pocas palabras, diciéndole que aquella noche, en aquel lugar de nadie, le gustaría que descubriese su piel, el límite entre ella y el mundo. Le pide que la toque, que la sienta con sus manos, porque los cuerpos se entienden, aunque las almas no siempre estén de acuerdo.
(...)
- Finalmente, me gustaría que entendieras mejor a los hombres. Hablas de expresar tu sexualidad femenina, de ayudarme a navegar por tu cuerpo, a tener paciencia, tiempo. Estoy de acuerdo, pero ¿ya se te ha ocurrido pensar que nosotros somos diferentes, por lo menos en lo que a tiempo se refiere?... No tenía valor para pedirte: enséñame tu cuerpo. Pero cuando te encontré, vi tu luz y te amé inmediatamente, pensé que a esas alturas de la vida ya no tenía nada más que perder si era honesto conmigo, y con la mujer que quería tener a mi lado.
¿Quién te ha dicho que los hombres sólo pensamos en el sexo? Al contrario, pasamos años de nuestra vida intentando hacernos creer a nosotros mismos que el sexo es importante... pero sabes una cosa? no entendemos nada. Creemos que sexo y eyaculación son lo mismo, pero no lo son. No aprendemos porque no tenemos valor para decirle a una mujer: enséñame tu cuerpo. No aprendemos porque ella tampoco tiene el valor para decir: aprende cómo soy. Nos quedamos en el primitivo instinto de supervivencia de la especie, y eso es todo.
Extraído de "Once minutos" de Paulo Coelo
Tiempo
In Poesía, In Reflexiones12 octubre 2009
Ermitaño
In Reflexiones, In Tarot, In Yo y mis circunstancias27 septiembre 2009
Soy la hembra espiritual, la actividad infinita de la pasividad. Como una copa, ofrezco mi vacío para que sea colmado.
Tú duermes, ya lo sé...
In PoesíaTe estoy velando.
No importa que estés lejos,
que no escuche
tu cadencia en la sombra;
no importa que no pueda
pasar mi mano sobre tu cabeza,
tus sienes y tus hombros.
Yo estoy velando, siempre.
No importa que no pueda acurrucarme
para que tú me envuelvas sin saberlo,
para que tú me abraces sin sentirlo,
para que me retengas
mientras yo tiemblo y digo simplemente
palabras que no escuchas.
Yo puedo estar tan lejos
pero sigo velando cuando duermes.
Julia Prilutsky
La granada y la Diosa... (P & P II)
In Cuentos, In Cultura, In El viaje de Innana, In Literatura, In Mitología20 septiembre 2009
Nunca sentí su mirada, encendida de deseo, recorriendo mi piel... y es que, hasta aquel momento, sólo sentí el escalofrío de las gotas de lluvia acariciándome, y el calor del sol en mi espalda... no sabía de la furia de la pasión del hombre, del ansia del Dios.
Yo, que sólo conocí el amor de Madre, la luz del sol, la vida, la brisa y la risa, la alegría... la inocencia...
¿acaso podría la Sibila saber de mi destino?, ¿ver las tinieblas que envolverían mi sino?
Son pocos los recuerdos que me quedan del infausto día: sus manos ciñéndome con fuerza, de repente, invisible a mis ojos. Su aroma penetrante y su fuerza me rodearon y me dejaron exhausta: luche con todas mis fuerzas. Grité, arañé, empujé y golpeé... no fue suficiente, y de repente se hizo la oscuridad... y el silencio.
Y el manto impenetrable de la noche lo cubrió todo, y el silencio se hizo denso. Sólo sentí el frío del mármol que era ahora mi piel. Mi corazón. Mi pensamiento. Y a pesar de que mi corazón se volvió de piedra, sentí la levedad de las lágrimas recorriendo mi pétreo rostro, y bañar la comisura de mis labios. Es mi último recuerdo a la entrada del Averno, navegando el Aqueronte.
No afloraron más recuerdos de esa impenetrable oscuridad que me cubrió cuando Plutón fue castigado por su osadía, y fui transformada en piedra. Pero un día desperté, y la piedra se hizo carne de nuevo, y bajé del pedestal en que me había colocado, en su sala del trono.
No era su prisionera, pero no había salida. Podía vagar por su infinito reino gris, donde no lucía la luz del sol, donde no corría la brisa, ni existía la alegría del color, del canto de los pájaros, ni el perfume de las flores. La tristeza lo impregnaba todo: lúgubre era también la antes cantarina agua de los ríos.
A veces lo sorprendía rondándome, se acercaba silencioso y me miraba. Una mirada cargada de infinita tristeza, y que yo correspondía con una mirada cargada de odio y de rabia, de dolor por los tesoros perdidos. No existía más que el silencio entre nosotros. En ese mundo gris yo ya sólo entendía de silencios.
Solía pasear sin rumbo, en un tiempo indefinido, pues allí el día y la noche dejaron de tener sentido. A veces me sentaba a las orillas del Acheron y dejaba que la nostalgia y la tristeza me envolvieran y me calaran, al igual que las diminutas gotas de agua que me salpicaban desde el río. Y me sumergía en aquellos recuerdos que poco a poco iban desapareciendo de mi mente, llevados por el agua... y es que a veces el dolor era tan insoportable que envidiaba a los habitantes de los Campos Elíseos, y mi único deseo era sumergirme en el Lethe, dejarme llevar por el olvido... con la esperanza de romper las cadenas de mis últimos recuerdos, y dejar atrás el dolor.
Pero yo, Diosa, hija del Dios de Dioses, era demasiado orgullosa, y no me dejé vencer por el desánimo y comencé a planear la forma de huir, pues la idea de ser rescatada aparecía descabellada en mis pensamientos: ¿qué Dios osaría desafiar al hermano de Júpiter?, ¿quién se enfrentaría con el señor de los muertos cara a cara?.
Comencé a rondar la sala del trono, protegida en la penumbra y la sombra de los rincones, huyendo de la tenue luz, escondiéndome tras las frías columnas. Comencé a asistir a los juicios en los que era requerida su presencia, esperando encontrar entre sus palabras o en las de los jueces un resquicio, algo a lo que asirme para poder escapar, buscar una salida. Asistí a un juicio tras otro, en los que de forma firme, pero misericordiosa imponía castigos o premiaba, y es que sólo existía justicia en aquella sala. ¿Era ese el mismo Dios arrebatado de pasión el que ahora, sentado en un trono, tan cercano como distante, administraba el perdón a sus nuevos súbditos?
No sé cómo ocurrió, pero acabé rondando la sala del trono siempre que él estaba cerca. Ahora intuía su presencia cercana, y más de una vez me creí descubierta, cuando su miraba registraba las sombras que me ocultaban entre las columnas. Admiraba su mirada serena y su voz profunda... y mientras le miraba calmaba el ardor de la piel de mis mejillas contra el frío mármol. Había amor en su forma de hablar, comprensión... y un toque de tristeza en su mirada... Nadie escapa a la soledad del trono, a la tristeza de este mundo sin vida.
Comencé a ansiar su cercanía, y dejé de esconderme en las sombras, buscando su mirada. No me acerqué, las heridas eran profundas aún, y su mirada en la mía se posaba triste. Demasiado dolor acumulado, rencores que aún ardían como ascuas entre las cenizas. Y el tiempo seguía su discurrir sin forma...
Una vez, antes de comenzar un juicio, se me acercó... y sentí como mi alma y mi cuerpo comenzaron a temblar... "¿querríais acompañarme en el trono?, vuestra belleza y presencia haría más llevadera la dureza del juicio a los nuevos habitantes del Averno". Sólo pude admirar la belleza de sus ojos, rodeados de pequeñas arrugas, me preguntaba por la suavidad de las ondas de su cabello y su barba... por la timidez de su sonrisa cuando terminó de formular su petición. Asentí con la cabeza, incapaz de hacer surgir las palabras, casi ya olvidadas, de mis labios.
Y mi rutina gris varió al asistir a los juicios desde el trono, lo que no hizo más que acrecentar un sentimiento desconocido en mí. Recuperé el habla, sólo para los juicios, cuando él me pedía mi opinión ante un caso especialmente difícil, o cuando yo le pedía clemencia para alguien que me había conmovido. Una vez terminado, mis labios volvían a quedar sellados, pero las palabras brotaban a borbotones por mis ojos y mis manos... mi mirada le recorría y se deleitaba en él, en el ancho de su espalda, lo poderoso de sus hombros... la fuerza de sus brazos y piernas... el calor que prometía su pecho. Y él me devolvía esa mirada, triste al principio... y acompañada de una leve sonrisa después, que se iba haciendo mayor a medida que descubría mis ojos fijos en los suyos.
Y le sonreí. Un día le sonreí con mis ojos, con mi corazón, que había creído convertido en piedra, con el temblor de mi piel, estremecida ante algo que jamás había sentido. Y es que sentada a su lado me dejaba envolver por su calor... y por el deseo que había vuelto a resurgir en él... un deseo que se había despertado en mí y que me era completamente desconocido. Me cogió de la mano tras el juicio, y me invitó a acompañarlo, paseando por su reino, entre árboles plateados que se mecían en una brisa invisible, en las riberas del Estigia. Sentía su piel abrasando la mía, su mano me quemaba y el ardor de mis mejillas tiñeron de color la palidez que me seguía en mi cautiverio.
-"Sois compasiva y dulce, suave como un bálsamo para mi soledad y mi tristeza... para la de todos nosotros. Siento haberte arrebatado a tu madre y todo el dolor que os he causado. Entendería que quisierais dejarnos, dejarme... si así lo deseáis os devolveré a vuestro mundo".
-"No, no" -dije, mientras posaba mi mano en sus labios... que respondieron con un beso en las yemas de mis dedos. Busqué su mirada, tristemente posada en el suelo, esperando una respuesta que le desgarrara el corazón sin piedad. Pero esa respuesta que él esperaba, aquella que yo creía que formularía a la menor oportunidad, no surgió de mis labios.
-"No quiero irme, éste es ahora mi sitio" dije, sosteniendo su cara entre mis manos, buscando su mirada con la mía.... sonriendo, temblando, y sintiendo que el mundo daba vueltas enloquecido y se detenía a la vez, sólo para nosotros, sólo para observarnos.
-"Sois una diosa, hija del Dios de Dioses, no puedo reteneros" dijo, mientras se me escapaba de entre las manos y se dejaba caer a los pies de un granado, a las orillas del río.
Miré el granado, y sin pensar lo que hacía cogí uno de sus frutos, lo abrí y me comí tres granos, sabiendo las consecuencias de ese acto, pero dispuesta a cualquier cosa con tal de no perder el nuevo tesoro encontrado.
Me miró confundido: "¿pero sabéis lo que habéis hecho? Habéis tomado alimento del Averno, ahora estáis condenada a permanecer aquí".
Me arrodillé a su lado, y volviendo a tomar su cara entre mis manos, le sonreí:
"Claro que conozco las consecuencias de mi acto. Soy una Diosa, y yo elijo mi destino".
Y nuestros labios se fundieron, se unieron nuestros cuerpos y nuestras almas. Elegí mi destino, y escogí acompañarte en el Averno.
Estación en la Tierra
In Poesía, In Reflexiones13 septiembre 2009
Aquí hace falta una mujer, y esa mujer soy yo.
No regreso hecha llanto, no quiero conciliarme
con los hechos extraños
Antiguamente tuve la inútil velada de levantar las tejas
para aplaudir los párrafos de la existencia ajena.
Antiguamente no había despertado.
No era necesario despertar.
Sin embargo, he despertado de espalda a tus discursos,
definitivamente de frente a la verídica, sencilla y clara
necesidad de ir a mi encuentro.
Ahora puedo negarte, retirarte mi voto.
Y puedo escuchar y gritar conmigo
irremisiblemente viva,
porque viva es la voz de las verdades,
porque viva es la voz del luminoso
salón del casamiento de ángel con la estrella.
Ahora puedo negarte. Toda soy de ventanas,
limpia, libre y clara de frente al campanario
de los oficios de los vivos y de los muertos.
Y siento la necesidad de las cosas pequeñas,
de esas cosas pequeñas que no trepan
como si tuvieran medido el sitio,
sino que esparcen como los árboles ardidos.
Con esa pequeñez me desplazo por tu arquitectura
de galería sin fin.
-siempre sin novedad, ni rosa, ni luna en su camino-
y llego al fondo donde te descubro
en esas generaciones de familias inmovilizadas
que terminan con la última viga anciana
cuando ya no hay otro dueño y el mueble está gastado.
Aída Cartagena Portalatín
(1918-1944), poeta dominicana
La vida siempre es más fuerte
In Animal humano, In Naturaleza, In Oso Pardo Cantábrico10 septiembre 2009
Este es el escenario postnuclear que presenta Pedro Cáceres en su artículo sobre el Oso Cantábrico, en el Mundo (pinchen aquí).
No somos osos, la evolución a hecho que nos sobrepongamos a un instinto reproductor más fuerte que uno mismo... y posiblemente antepondríamos nuestra propia supervivencia a la continuidad de la especie humana... ¿O no? o es que el conocimiento profundo de que somos los últimos haría que nuestros instintos dormidos salieran otra vez a la superficie?
Pues ese instinto de supervivencia, de preservación de la propia especie, la continuidad de la vida, la fuerza de la Naturaleza es lo que ha hecho que un oso se haya jugado la vida para poder reproducirse.
Tal y como comentan en el artículo, en el norte de España sobreviven las dos últimas poblaciones de Oso Pardo Cantábrico (Ursus arctos), la occidental y la oriental, separadas, nada más y nada menos, que por una vía de tren, una carretera y una autopista. El caso del oso cantábrico me recuerda en muchos aspectos al Leopardo Amur, del que ya hablé aquí, que se encuentra en grave riesgo de extinción, acentuado además por una fuerte endogamia debido a que sus poblaciones se encuentran aisladas. La reproducción endogámica es una de las peores cosas que le puede pasar a una especie que ya se encuentra en riesgo de extinción, porque las nuevas crías son más débiles y suelen nacer con defectos genéticos.
Recientemente se han encontrado restos que indican que existen dos nuevas crías de oso cantábrico procedentes de un macho de la población occidental (más numerosa) y una hembra oriental. Una muy buena noticia, y una gran esperanza para la continuidad de la especie. Ojalá se siga trabajando para crear pasillos que comuniquen ambas poblaciones, y que dentro de poco toda la cordillera cantábrica esté llena de oseznos.
A veces me apetece tener branquias...
In Ballenas, In Japón, In Música, In Naturaleza07 septiembre 2009
Os dejo con una joya grabada por Jon Rawlison, con música de un grupo de Seattle que se llama Barcelona, un acompañamiento perfecto.
Disfrutadlo.
Un consejo
In Música, In Perlas de sabiduría, In Recuerdos, In Sentimientos, In Yo y mis circunstanciasÉramos un grupo muy unido, muy pequeño, y aunque las pasamos canutas y hubo de todo un poco, nos cogimos todos mucho cariño.
Ese último día, quien más, quien menos, se emocionó y se le saltaron un par de lagrimillas, viendo el video y con la posterior despedida (evidentemente, yo en mi línea, un par de lagrimillas y algunas más de regalo).
Y hoy me gustaría compartirlo con vosotros. Es largo, pero es precioso, y tiene verdades como puños.
Ausencias...
In Amor, In Poesía, In Yo y mis circunstancias03 septiembre 2009
Me quema en la mano
la ausencia de tus dedos
entrelazados con los míos.
Me abrasa el recuerdo
de tus manos acariciando mi rostro
y mi pelo sigue enredado entre tus dedos.
A veces siento un aleteo en los labios
y miles de mariposas recorren mi boca
y sólo por un momento
vuelvo a recordar el sabor de tus besos.
Intimidad
In Amistad, In Amor, In Percepciones, In Reflexiones, In Sentimientos, In Yo y mis circunstanciasY es que a veces internet hace magia, y a uno de mis antiguos amigos lo recuperé a través del facebook. Y a partir de una tarde de abril, las cosas han vuelto a ser como hace más de diez años. Cuando la ruptura de nuestro grupo, a causa de la ruptura de su relación, lo mandó todo al garete. Yo me equivoqué en mis decisiones de aquel momento, pero se aprende de todo en esta vida.
Y poco a poco la relación se está recuperando. Y ayer estuvimos hablando de los viejos tiempos... y la intimidad que tenía con él volvió a cobrar la forma de su mano acariciando mi espalda.
En la primera tarde de abril escarbamos para intentar averiguar el porqué de nuestra separación, pero había miles de razones. Los siguientes días nos hemos puesto al día de nuestras vidas, de la mía, de la de los amigos que teníamos en común. Cada una corriendo por un derrotero distinto. Y ayer volvimos a nosotros, a aquello que nos unió en tercero de carrera. A aquello que nos separó.
Ayer le dije: "es que me parece que te despertaba un tremendo instinto de protección..." pero hoy me he dado cuenta de que era al revés: la que se sentía protegida era yo. Y también muy querida.
Ratoncito, creo que he tenido mucha suerte contigo.
El hombre que me ame...
In Amor, In Poesía, In Sentimientos, In Yo y mis circunstancias02 septiembre 2009
El hombre que me ame
deberá saber descorrer las cortinas de la piel,
encontrar la profundidad de mis ojos
y conocer lo que anida en mí,
la golondrina transparente de la ternura.
II
El hombre que me ame
no querrá poseerme como una mercancía,
ni exhibirme como un trofeo de caza,
sabrá estar a mi lado
con el mismo amor
conque yo estaré al lado suyo.
III
El amor del hombre que me ame
será fuerte como los árboles de ceibo,
protector y seguro como ellos,
limpio como una mañana de diciembre.
IV
El hombre que me ame
no dudará de mi sonrisa
ni temerá la abundancia de mi pelo,
respetará la tristeza, el silencio
y con caricias tocará mi vientre como guitarra
para que brote música y alegría
desde el fondo de mi cuerpo.
V
El hombre que me ame
podrá encontrar en mí
la hamaca donde descansar
el pesado fardo de sus preocupaciones,
la amiga con quien compartir sus íntimos secretos,
el lago donde flotar
sin miedo de que el ancla del compromiso
le impida volar cuando se le ocurra ser pájaro.
VI
El hombre que me ame
hará poesía con su vida,
construyendo cada día
con la mirada puesta en el futuro.
VII
Por sobre todas las cosas,
el hombre que me ame
deberá amar al pueblo
no como una abstracta palabra
sacada de la manga,
sino como algo real, concreto,
ante quien rendir homenaje con acciones
y dar la vida si es necesario.
VIII
El hombre que me ame
reconocerá mi rostro en la trinchera
rodilla en tierra me amará
mientras los dos disparamos juntos
contra el enemigo.
IX
El amor de mi hombre
no conocerá el miedo a la entrega,
ni temerá descubrirse ante la magia del enamoramiento
en una plaza llena de multitudes.
Podrá gritar -te quiero-
o hacer rótulos en lo alto de los edificios
proclamando su derecho a sentir
el más hermoso y humano de los sentimientos.
X
El amor de mi hombre
no le huirá a las cocinas,
ni a los pañales del hijo,
será como un viento fresco
llevándose entre nubes de sueño y de pasado,
las debilidades que, por siglos, nos mantuvieron separados
como seres de distinta estatura.
XI
El amor de mi hombre
no querrá rotularme y etiquetarme,
me dará aire, espacio,
alimento para crecer y ser mejor,
como una Revolución
que hace de cada día
el comienzo de una nueva victoria
Mujeres maduras vs Mujeres inmaduras
In Amor, In Perlas de sabiduría, In Psicología, In Reflexiones, In Yo y mis circunstancias31 agosto 2009
Me gustaría decir que soy UNA MUJER MADURA... pero creo que aún ESTOY EN PROCESO ^_^
El Silencio...
In Cultura, In La mente, In Literatura, In ReflexionesEl Silencio no es, según palabras de su autor, un libro de autoayuda. Tampoco yo lo creo. Tal y como lo he visto yo al leer el libro, creo que trata de como una persona puede acabar con sus ideas preconcebidas. De como una persona, a través del estudio, la investigación y la experiencia personal puede acabar rompiendo con sus viejos tabúes y ampliar la concepción que tiene del mundo y de lo que le rodea.
Y es que antes de entrar en materia y hablar sobre el argumento del libro, me gustaría aclarar una cosa: si bien es cierto que catalogado como libros de autoayuda se ha publicado mucha basura, también se han publicado buenos libros procedentes de eminentes psicólogos y científicos. Y es que yo creo lo siguiente: la autoayuda es un género que sólo ayuda o guía, es uno mismo el que debe encontrar la solución a sus problemas. Y al igual que digo de un libro, pasa con las personas que van al psicólogo, terapeutas, etc: el psicólogo o terapeuta sólo te va a ayudar a encontrar una guía, pero el que tendrá que recorrer el camino de la curación es uno mismo. Esta es sólo mi opinión personal, basada en mi propia experiencia. Cada persona es un caso y un mundo diferente.
Y pasando al libro, en él el protagonista es el propio autor, y cómo debe enfrentarse a sus propios prejuicios cuando una amiga, antigua alumna de un monasterio Zen en Japón y que ahora trabaja como profesora de meditación en España, le pide ayuda para curarse de un cáncer. ¿Crees en la capacidad de la autocuración en el ser humano?, ¿cuál es la primera respuesta que te viene a la cabeza?, ¿y si alguien creyera que puede hacerlo?, ¿y si te demostraran que es algo que ya ha ocurrido antes, que hay personas que se han curado a sí mismas?.
El autor, a través de su investigación personal, su experiencia y la vida de su amiga se responde a esas preguntas. Yo busqué también mis respuestas.
¿Os apetece buscar las vuestras?
Querido Watson
In Literatura, In Perlas de sabiduría21 agosto 2009
La voz del viento
In Amor, In Poesía, In Yo y mis circunstancias20 agosto 2009
Pequeños pasitos
In La mente, In Psicología, In Reflexiones, In Yo y mis circunstancias19 agosto 2009
Fortaleza
In Perlas de sabiduría, In Psicología, In Reflexiones, In Tarot, In Yo y mis circunstancias17 agosto 2009
Bueno... el texto que viene a continuación es una "salida del armario" en toda regla, fruto de una lectura que me realicé hace algunos meses, y que ahora estoy volviendo a releer, revivir... es la lectura de un arcano del Tarot que se llama "la Fuerza".
Soy el impulso interior que mueve el espíritu, la confianza en la razón, el optimismo del que se sabe protegido. Soy el poder sin frenos de la creatividad original.
Quiero enseñarte la fortaleza interior, el coraje y el compromiso. Autoconfianza y alegría de vivir.
Quien controla sus instintos logra dominar las pasiones, sublimar las tentaciones, dejarlas fluir y hacerlas cesar. Observa a tu alrededor y deja que los acontecimientos vayan definiendo el sentido del cambio. Fluye con la corriente y, poco a poco, ve tomando el control necesario, primero sobre ti mismo, y luego sobre el entorno.
No alcanzarás la sabiduría del Ermitaño sin prudencia, mesura y control personal. Se sutil. Emplea la diplomacia. Lo que nos hace perder el control es parte de nuestra propia sombra. Para madurar hay que conocer nuestro lado oscuro. Hacer lado a la sombra requiere coraje y confianza, pero sólo enfrentándolo y reconociéndolo podremos trascenderla.
Cuando permites que las pasiones y emociones desmedidas condicionen tu vida, ellas dominan tu mundo. Conducen más allá de la razón y del espíritu, no dejan manifestarse al Amor y la verdad permanece oculta.
Cuando tratas de controlar e imponerte, predominan la ira, el deseo y el miedo. El Amor no está presente, y lo alejas más y más. No hay que dominarse por la fuerza: tarde o temprano la pasión que deseas dominar asalta e interrumpe. No trates de dominar al otro: tarde o temprano se revelará contra ti.
Cuando nos vemos a nosotros mismos bajo una luz favorecedora, desde nuestro mejor ángulo, maquillando las motivaciones inconfesables y las fuerzas oscuras subyacentes, dejamos que el ego nos muestre lo que queremos ver. Siempre habrá excusas y otros culpables, a fin de no asumir la responsabilidad por cuanto pensamos, sentimos y hacemos. De esta manera no aceptamos nuestra sombra, no admitimos que ella nos pertenece y no podemos transitar por su territorio para superarla.
La verdadera fortaleza se manifiesta en la personalidad, en la confianza en ti mismo, en tu habilidad para afrontar los desafíos y las dificultades, ya sea para transformarlos o aceptarlos.
Soy la potencia misma de la consciencia. El punto de unión entre la energía espiritual y la energía instintiva. Nada me asusta, soy el comienzo de la Creación.
Miedo
In La mente, In Miedo, In Reflexiones, In Yo y mis circunstancias16 agosto 2009
Lobos: ¿estaremos aprendiendo?
In Animal humano, In Naturaleza, In ReflexionesDurante la semana que estuve de vacaciones en Málaga tuve la oportunidad de hacer una visita a Lobo Park (Antequera). Para ser sincera, desconocía totalmente la existencia de un centro de estas características en España, sobre todo si tenemos en cuenta la cultura de miedo al lobo que existe aún en nuestro país.
Cristal
In Sentimientos, In Yo y mis circunstancias15 agosto 2009
Pulida por agua y aire,
Nací, como el cristal,
El más hermoso...
El más frágil...
Pero tú nunca me viste,
Solo era transparente...
Las cosas que no nos dijimos
In Cultura, In Literatura14 agosto 2009
La Magia
In Citas, In La mente, In Magia13 agosto 2009
¿Quién eres?
In Reflexiones, In Yo y mis circunstancias10 agosto 2009
Emprender
In Perlas de sabiduría, In Trabajo, In Tú09 agosto 2009
Recuerdos (II)
In Recuerdos, In Yo y mis circunstancias06 agosto 2009
Es como un agujero negro, que lo devora todo a su paso...
Se instala en tu mente y en tu alma con un hambre voraz...
Y se acaba llevando los recuerdos más preciosos...
El mayor de los tesoros.
Vivir despeinada... Para María
In Amistad, In Yo y mis circunstancias03 agosto 2009
Todos deberíamos atender esta frase con intensidad, sin poses, disfrutando cada momento, cada experiencia, cada afecto. Sin lugar a dudas, seríamos mucho más felices.
Hoy he aprendido que hay que dejar que la vida te despeine, por eso he decidido disfrutar la vida con mayor intensidad… El mundo está loco. Definitivamente loco… Lo rico, engorda. Lo lindo sale caro. El sol que ilumina tu rostro arruga. Y lo realmente bueno de esta vida, despeina…
- Hacer el amor, despeina.
- Reírte a carcajadas, despeina.
- Viajar, volar, correr, meterte en el mar, despeina.
- Quitarte la ropa, despeina.
- Besar a la persona que amas, despeina.
- Jugar, despeina.
- Cantar hasta que te quedes sin aire, despeina.
- Bailar hasta que dudes si fue buena idea ponerte tacones altos esa noche, te deja el pelo irreconocible…
Así que como siempre cada vez que nos veamos yo voy a estar con el cabello despeinado…
Sin embargo, no tengas duda de que estaré pasando por el momento más feliz de mi vida. Es ley de vida: siempre va a estar más despeinada la mujer que elija ir en el primer carrito de la montaña rusa, que la que elija no subirse.
Puede ser que me sienta tentado a ser una mujer impecable, peinada y planchadita por dentro y por fuera. El aviso clasificado de este mundo exige buena presencia: Péinate, ponte, sácate, cómprate, corre, adelgaza, come sano, camina derechita, ponte seria…
Y quizá debería seguir las instrucciones pero ¿cuando me van a dar la orden de ser feliz? Acaso no se dan cuenta que para lucir linda, me debo de sentir linda… ¡La persona más linda que puedo ser!
Lo único que realmente importa es que al mirarme al espejo, vea a la mujer que debo ser. Por eso mi recomendación a todas las mujeres:
Entrégate, Come rico, Besa, Abraza, Haz el amor, Baila, Enamórate, Relájate, Viaja, Salta, Acuéstate tarde, Levántate temprano, Corre, Vuela, Canta, Ponte linda, Ponte cómoda, Admira el paisaje, Disfruta,
y sobre todo, deja que la vida te despeine!!!!
Lo peor que puede pasarte es que, sonriendo frente al espejo, te tengas que volver a peinar.
SUERTE Y QUE DISFRUTES...