Sigo andando, duna tras duna
caigo a veces de rodillas,
la arena se clava en mis manos
dudo si podré continuar...
No sé cuánto durará este viaje,
a veces me siento perdida
y no sé que dirección tomar.
Intento aferrarme a lo que creía ser:
mis recuerdos, mis sentimientos, mi pensamiento,
pero el viento del desierto me los quita de las manos
arena que se desliza entre los dedos,
vuelan con el viento...
y capa a capa voy cayendo,
cada vez más vacía...
y me da miedo...
miedo a llegar a ser NADA...
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