Hace dos días falleció un compañero de trabajo, que trabaja en otro edificio. Era muy joven, 44 años, fue fulminante, un infarto.
No lo había asimilado, le ví hace un par de semanas. Apenas habíamos trabajado juntos, nuestros campos no tenían nada que ver...
Es en estos momentos donde te das cuenta de lo frágil que es la vida, de que todo puede desaparecer en un momento... y eso es lo que hace que te arriesgues, que luches por conseguir tus deseos, que vivas y ames más... también te hace cometer más errores, pero es parte de estar vivo.
Carpe Diem... luchad por lo que queréis, aunque quizá no logréis alcanzarlo nunca.... disfrutad del placer del viaje, del camino, de la búsqueda...
Para Alberto.
1 Comentarios:
Querida
24 de julio de 2008, 16:51En tres semanas he perdido a dos de los míos. Es jodído, si.
Al principio piensas ¿ves? hay que disfrutar más, no me quejaré, viviré el presente, pero después volvemos a la rutina, a las preocupaciones y nos dejamos llevar en una espiral que nos controla el tiempo.
Lo siento mucho
No sé si es el momento, pero en mi blog propongo un juego ¿te animas a jugar? Te vendrá bien.
Un beso.
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