Sentada en la arena,
sintiendo como las piedrecillas
se clavan,
en mi pies
en mi piel
en el alma...
sólo puedo mirar hacia el mar,
mirada fija
sobre olas que arrasan,
van y vienen...
Sube la marea,
el mar se agita,
las olas siguen golpeando...
bajará la marea
y llegará la calma...
2 Comentarios:
El mar. La mar.
16 de febrero de 2009, 18:55El mar. ¡Sólo la mar!
¿Por qué me trajiste, padre,
a la ciudad?
¿Por qué me desenterraste
del mar?
En sueños, la marejada
me tira del corazón.
Se lo quisiera llevar.
Padre, ¿por qué me trajiste
acá?
Rafale Alberti
Un blog muy bonito.
Un saludo
Muchas gracias Javier...
19 de febrero de 2009, 21:01a mí me encanta el mar, a veces lo echo muchísimo de menos... mira que lo he visto pocas veces, pero sí que tira del corazón y del alma, sí.
Un abrazo
Publicar un comentario