Una niña va a un restaurante con sus padres. El camarero se acerca y le pregunta: "¿Qué desean?".
La niña suelta: "quiero un perrito caliente". Su madre mira la carta y dice: "Quiero pescado hervido".
"Suena bien - afirma el padre. Se vuelve al camarero y le dice: "serán tres de pescado hervido".
El camarero inclina la cabeza y vuelve a la cocina. A través de la puerta se le oye decir: "Luis, dos de pescado hervido y un perrito caliente". "Mira mamá - dice la niña - cree que soy real".
La religión del ateísmo
Hace 10 años
1 Comentarios:
no entendi, aclaralo
23 de junio de 2013, 10:54Publicar un comentario