Mi regalo del día de Reyes...

06 enero 2009






Se deslizó despacio entre las sábanas, sin hacer ruido, no quería despertarle... tenía una sorpresa.



Tenía los pies helados de frío, a pesar de llevar los calcetines puestos, así que cogió rápido una camiseta suya y se fué a la cocina.



Él siempre se preocupaba de los demás, de sus problemas, de sus alegrías... dando de sí tanto que a veces parecía que no le quedaba nada para él... ella sólo era una luna más en su universo. Un universo más lleno de vida, luz y sabiduría de lo que nadie se podría imaginar...



Se encerró en la cocina y comenzó a prepar el desayuno: café con leche, pan tostado con tomate... croissants con mermelada, zumo de naranja... todo bien colocado en una bandeja... sólo faltaba un detalle: salió al jardín y cortó dos rosas, una blanca y otra roja.
Volvió a la cocina, las colocó en la bandeja y volvió con ella a la cama. La colocó en la mesilla, se sentó a su lado y con una de las rosas le acarició la frente, los ojos, los labios... seguía dormido, así que le besó y le susurró "te quiero" al oído... cuando él abrió los ojos le dijo: "te he hecho el desayuno"... el sólo la abrazó fuerte... "Gracias"



4 Comentarios:

EvitaBlu dijo...

¿Te hicieron este regalo?

El pà amb tomaquet és infalible por las mañanas :O

Besos catalanes, MUÁ!

7 de enero de 2009, 9:20
Cristina dijo...

Jajajaja infalible por las mañanas? es posible...
No, es un regalo que me hicieron...en el relato es ella la que hace el regalo :), es algo muy pequeño, pero personalmente a mí, que me hagan el desayuno y me despierten así, me encantaría... le gustará al chico? esperemos que sí...

Un beso enorme

7 de enero de 2009, 9:29
EvitaBlu dijo...

Le gustará.

El tomate tiene mucho hierro :O

9 de enero de 2009, 17:48
Cristina dijo...

Jijiji... eso dice mi amigo Alberto... que roba el tomate de las ensaladas de los demás jajajaja...

10 de enero de 2009, 23:15